19 de julio de 2010

La excusa del narcotráfico

“La campaña antinarco en México, Colombia, Centroamérica y el Caribe, no ataca las raíces ni los pilares de la criminalidad y del tráfico de drogas: o los deja intactos o los acicatea. Eso sí, los utiliza como excusa para intervenir en tierra, aire y mar, junto al despliegue de bases, esquemas portuarios y empresariales de dominio económico-territorial sobre recursos humanos y materiales”.
Esta es la contundente opinión del especialista en estudios latinoamericanos John Saxe-Fernández, del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades (CEIICH) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), al analizar el contexto internacional en que se da la participación de Estados Unidos, en la lucha contra el narcotráfico más allá de sus fronteras oficiales.
Al ser consultado por este Semanario, Saxe-Fernández criticó desde Ciudad México las políticas económicas de Estados Unidos que, mientras profundizan la pobreza en América Latina, “auspicia a los inversionistas foráneos como piedra angular del modelo”, el cual promueve la informalidad económica, la criminalidad y el narcotráfico.
Frente a esta coyuntura internacional, el experto sostiene que “Washington y su Pentágono saben que el estallido social está en curso y es de largo alcance y que muchos de nuestros pueblos están reaccionando a la crónica embestida de clase, de corte oligárquico-imperial y antinacional, tomando el mando de su destino, de su economía, de sus recursos, comercio y moneda, en mano propia. De ahí la reactivación de la Cuarta Flota (que incluye a la Marina de Guerra y a los Guardacostas de EE.UU.), el despliegue de bases en Colombia, y a un año del golpe en Honduras, la militarización de
Costa Rica”.
Según Saxe-Fernández, “el manejo que hace Washington de la dinámica entre armas,
negocios (bancos, empresas de inversión, petroleras, mineras, etc) y drogas, es central en la promoción del caos y la inestabilidad. Es la base y excusa para la intervención y ocupación militar, en curso en México y -por lo que veo- también en Costa Rica. Todo el mundo sabe que el instrumento militar no es central en cualquier diseño antinarco, que la información, la investigación policial, el control del sistema financiero y del flujo de armamento, sí son los rubros esenciales”.